domingo, 23 de febrero de 2014

EL FIN DE LOS DÍAS

EL FIN DE LOS DÍAS
Hoy siento que los días pasan más rápidos, que antes
El silencio corre tras mis pasos
Es como que la muerte quiere alcanzarme
Aun estando consiente de mis hechos.
Tengo los días contados, quizás
Mi  intranquilidad parece un anuncio
Los sufrimientos, no son nada
Los recuerdos de las dichas,
Son sólo recuerdos, ya nada importa
La hipocresía no pudo conmigo
Fui feliz con la sonrisa de mi madre
De mi mujer y mis hijos
Hoy debería estar lleno de alegría
Pero, solo hay tristeza
Una tristeza que no sé, de donde viene
Pero me embarga, me envuelve
La sonrisa me evade, me esfuerzo
Nada, no viene una real sonrisa
En como si estuviera lleno, de una gran pena
Me arde el pecho, no es normal
Siento dolor inmenso, no es de siempre
La angustia, me gana
Mi cerebro se adormece,
          Me da una pesadez, que me hace sentir agotado
Cierro mis ojos tratando de encontrarme
El viento me golpea, me enmudece
Quiero hablar, cantar como antes
No puedo, veo mi rostro alejarse, y me falta el aire
Cierro mis ojos, para al abrirlos despertar
Y, un nudo en la garganta, me decae el cuerpo
Nuevamente siento pesadez
Mi cerebro, no funciona
Me doy cuenta que cuando los años pasan
El camino es más claro
La persona es más simple, más reflexiva
Y el corazón siempre está lleno para dar amor
De ese amor infinito que recibimos para dar
Hoy día, es el día más triste de mi vida
Debería estar feliz, pero pareciese que estoy
En el fin de los días míos.
WILLDER Gamarra Soles.
Trujillo- Perú.
22.02.2014.

martes, 4 de febrero de 2014

LOS PERROS ENDEMONIADOS

LOS PERROS ENDEMONIADOS

Eduardo caminaba hacia la casa de su prima, el lugar tenía sembríos, como una casa de campo con sus guardianes, gallinas, patos, grullos, eran ya las ocho de la noche, él regresaba tranquilo después de una tarde hermosa, había caminado en la pequeña plazuela el recreo, en su regresó pasó por un costado de la plaza de armas de Trujillo,
-         Eduardito, no vayas a llegar muy tarde, no valla ser se te presente los perros endemoniados, le decía su prima jajajajajaja, que era una bromista de primera.  
Eso de los perros endemoniados, se lo había dicho su prima ya hace una semana, cuando ella visitó la casa de sus padres en Chiclín.
Ese día él había tomado un carro que venía del norte a las 3pm, bajo en Mansiche y caminó hacia la plaza de Armas conversando con una amiga, posteriormente dolaron en Jr. Pizarro, acompañándola hasta la calle Estete, que es la única calle perimetral de la plazuela el Recreo a unos 25 metros de distancia de la plazuela, había una Quinta, allí vivía Marcelita Trelles, estuvo conversando con ella hasta que le ganó la noche, presuroso se encamino a la casa de su prima, en el camino sonreía solo, al recordar la sonrisa de Marcelita, que le decía no les creas ni a tu prima, ni a mi madre, esto,  por lo que decía la madre de ella, que antes por la calle salía una botija en la madrugada y al que lo encontraba solo le hacía votar espuma por la boca.
Al llegar a la primera cuadra de Pizarro, diviso la casa de su prima, no divisó el colegio San Vicente, construido en un terreno donado por el filántropo,  señor Vicente Gonzáles de Orbegoso, propietario del fundo San Andrés, quien regaló una hectárea de terreno a las hijas de la Caridad. En ese lugar se fundó el 25 de Junio de 1920 el Colegio San Vicente de Paul.
Unos minutos más tarde estaría llegando a donde vivía su prima, el lugar tenía un cerco de casi 100 mtr lineales, su pared era de unos 70 cms de alto, luego un arbusto cubría la parte superior superando los 2.5 mtr de altura.   Comenzó a cruzar el cerco para dirigirse a la propiedad de su prima, tenía una entrada abierta, sólo un palo servía de  tranquera, desde ese lugar se podía mirar una carreta antigua, que estaba como reliquia, no había veredas, ni pavimento, todo era tierra, caminó en la oscuridad, más el brillo del interior de la casa de su prima era impresionante, ante la oscuridad de las velas de algunas casas.
Algunas plantas de girasoles  o mirasol, habían terminado hace horas su trabajo de seguimiento a los rayos UV del sol, una piedra en el camino oscuro lo hace trastabillar y casi cae a la tierra, esa tierra  ya seca, pero dura por el riego constante, esto en le hizo dar un pequeño grito y algunos pasos fuertes para no perder el equilibrio, ya le faltaban como unos veinte pasos, cuando de repente se le aparece un perro blanco grande, que le empezó a gruñir, al poco rato aparece otro perro color negro,  también frente a  él, después uno color canela, otro marrón más pequeño, al poco raro estaba rodeado de perros de todos los tamaños y colores eran unos diez perros quizás, no los pudo contar nunca.
De un momento a otro se quedó petrificado, rodeado de todos esos perros,  de diferentes razas, y diferentes tamaños.



ANTES DEL PRIMER PASO.

Miró al perro negro en la oscuridad de la noche, los ojos del perro se veían rojos, capaz de intimidar a cualesquier persona, él también se intimido, el perro demostraba una fiereza increíble, enseñándole sus colmillos, Eduardo trató de calmarse, recordó que en su tierra Chiclín cada vez que salía del cine en turno de noche, Sultán, el perro fiero y bravo criado por su padre, se quedaba en la puerta de la casa, este siempre le recibía con fiereza, con ladrido y con intenciones de atacar, pero él se quedaba quieto sin movimiento, entonces esperaba un momento y con voz rígida le decía:
-         Sultán, quieto, Sultán, soy yo, ven, acércate.
Recordó que él no se movía, entonces Sultán se acercaba lentamente, mirándole fijamente con sus ojos rojos, y un rostro disgustado; entonces él le decía:
-         Soy Eduardo, Viejo amigo, tranquilo, no te molestes, ven reiteraba diciendo y a la vez realizaba ese chasqueteo de lengua y dientes, que tanto les gusta a los perros y lo toman como un sonido de aprecio y cariño, añadiendo el chasqueteo de los dedos.
Entonces Eduardo de lo tieso que se encontraba, sin doblar la rodilla desplazó su pie derecho lentamente a un paso corto, este movimiento fue seguido por la pierna izquierda para terminar nuevamente paralizado.






ANTES DEL SEGUNDO PASO.

Recordó que después que se le acercaba Sultán, él presto le hacía cariño, frotando sus manos a la altura de su cuello; pero su pensamiento se quedó trunco, cuando sintió el roce de uno de los perros en su pierna, como tratando de ver su reacción, su respuesta fue un parálisis total.
Todo el lado izquierdo donde rozó el perro, se le enduró, cuál de ellos lo rozó,  ni pensarlo, ni verlo, pero todo ese bendito lado, quedó paralizado, la oreja izquierda parecía que se le estiraba hacía arriba, los pelos del lado izquierdo estaban parados, la pierna izquierda se erizo como carne de gallina, quería voltear pero sabía que era un error, solo su boca se chuequeo un poco, haciendo un estiramiento hacía su hombro izquierdo.
No cálculo el tiempo, pero este parecía una eternidad, entonces los perros se calmaron un poco, y él traslado nuevamente la pierna derecha, estirada totalmente, sin doblar para nada la rodilla, después de esto acercaría lentamente la pierna izquierda, en este movimiento nuevamente los perros gruñeron.



ANTES DEL TERCER PASO.

Recordó a Káiser el hermoso pastor alemán criado por su padre y con el cual le gustaba jugar, este hermoso perro siempre se le acercaba le olía los pies, la pierna y hasta la entre pierna cuando él llegaba de la calle, al comienzo él se incomodaba hasta que su padre le dijo:
-         Déjalo hacer su trabajo.
-         ¿Qué  trabajo? Pregunto, Eduardo.
-         Identificación, dijo su padre, él está identificando si te has ido a lugares en donde hay otros perros y quiénes son estos, si son tranquilo o fieros.
-         Vengo de la Casa de Juan Manuel, él tiene una perrita Doberman.
-         Míralo, dijo su padre, continuando, es por eso que te mueve la cola,  como quién te dice, anda pues llévame a conocerla.
Entonces sus hermanos, y su madre se rieron con grandes carcajadas y uno de ellos, dijo:
-         Para lo que has quedado para ser alcahuete de perros. Lo que prolongo las risas.
Nuevamente Eduardo sin levantar el pie, alargo la pierna derecha, para dar un paso más.


ANTES DEL CUARTO PASO.

Antes de salir de casa Eduardo como siempre acaricio Káiser, después Andrax que tenía la particularidad de echarse en sus pies y luego a  Sultán, quién con la mirada parecía decirle no te demores, no llegues tarde, que te puedo morder. Que linda era Andrax, una hermosa pastor Alemán, color negro con pecho marrón claro, tenía sus orejas hermosas con las que parecía detectar hasta los mínimos movimientos de una lagartija en el campo, luego paso por la casa de Juan Manuel en donde Chiquita, que era el nombre de la perrita Doberman que parecía estar en celo, chiquita ni bien reconocía a Eduardo se paraba en dos patitas, para que el la sujetase e hiciese bailar, en esa oportunidad también bailo, jugando un rato él para que le acariciase, después en la casa de Marcelita Trelles, con su pie rasco la barriguita de su perrita Pekines se deleitaba con esas caricias quedando con las patitas hacia arriba y retorcijándose de un lado a otro, pulguita era la mascota más mimada en la casa de Marcelita Trelles, era un pequeña perrita media regordeta, pelo un poco ensortijado, orejas caídas, pelo de color blanco que tapaban un poco los ojos de pulguita.
Qué hubiese pasado si se quedaba en casa de Marcelita conversando más rato, seguro que no lo dejaban partir hasta el otro día, porque esa era la costumbre en el pueblo, de Chiclín en donde siempre reinaba una desbordante amabilidad, pero también recordó que su madre le decía:
-         Recuerda que no estás en tu pueblo, en la ciudad no tienen las mismas costumbres, que en nuestro querido Chiclín.
Eduardo tenía en su mano un casco romano, le gustaba el arte y tenía una presentación con el grupo de teatro de su pueblo con los que iba a presentarse en una obra por Semana Santa. Uno de los perros le metió el hocico  en la entre pierna, él se puso blanco,  más blanco de lo que era, mientras que otro de los perros le olfateaba la pierna, el inmóvil, asustado pero sereno, quiso gritar, pero en lugar de eso, comenzó nuevamente a desplazar su pierna derecha lentamente, para que los perros no se sientan amenazados, porque cuando se sienten amenazados, estos animales se endemonian, es decir se ponen demasiados agresivos, y atacan sin piedad, además eran muchos él había calculado que eran diez quizás más o quizás menos, felizmente gruñían amenazantes, pero aún no habían intentado morderlo.



ANTES DEL QUINTO PASO.

Tal vez los perros lo olfateaban para reconocer de donde venía, quizás eran perros románticos y enamoradizos, trato de ver si movían la cola pero prefirió no mirarlos, de repente a uno de ellos no le gustaba su mirada, y con este pretexto podían atacarlo, porque así sucedió en la pelea que tuvieron en la fiesta del señor de la caña, todos estaban bailando y tomando tranquilos, cuando de repente un señor no conocido, que no era lugareño, miró a Don Ramón Castilla, de esa manera le llamaban al papá de Jorgito Méndez , porque se dejó los bigotes grandes como Ramón Castilla.
Dicen que todos bailaban contentos tomando unos tragos, Don Ramón Castilla estaba que bailaba con una joven hermosa que también no era de Chiclín, y de repente el Negro Batán, que era el seudónimo del no lugareño al sentir la mirada de Don Ramón  Castilla, reaccionó de manera no apropiada, el tipo estaba mareado y le dijo:
-         Qué miras,  xzvxz, el pobre señor Méndez, contestó.
-         A mí me hablas negro de Mxzvxz, y fue suficiente.
Dicen que el negro atacó tan rápidamente, que el señor Méndez, no tuvo ni tiempo de contestar un solo golpe, que si no estaba presente en la fiesta el señor Frontado le daban peor que majado de plátano. 
Mejor ni mirarlos, dijo para sí mismo Eduardo, mientras estiraba arrastrando lentamente su pierna derecha, sin doblar la rodilla, para que no  se sintiesen amenazados, no levantó para nada la pierna, pues esto es agresión y los perros lo tienen grabado en sus genes, mejor es sumisión, cero movimientos o movimientos casi no percibidos, entonces al deslizar el pie lentamente, el movimiento del cuerpo también debería ser sin el movimiento de los brazos, pero en una de sus manos él tenía, el casco romano, al día siguiente era la función de teatro. Al fin se completó el paso quinto.


ANTES DEL SEXTO PASO.

El casco ya le estaba incomodando, podía resbalarse y esto sería más que un pretexto, para que uno de los perros se sienta ofendido, agredido, o realice un movimiento de huida para posteriormente atacar, y con ese ataque el final, porque todos los demás perros también atacarían, eran grandes esos animales, horrible su mirada, feroces sus gestos, y sus dientes podrían desgarrar cualesquier tipo de carnes.
Si se le caía su casco, el resultado de ataque era más rápido, porque los perros hubiesen saltado y eso era como un cuidado nos ataca, retirada en señal de defensa y morder en señal de ataque, pero al morder desgarran las carnes, porque los perros cuando están feroces o mordiendo a quién no conocen, le clavan los dientes, para posteriormente mover la cabeza de un lado a otro y con esto sus colmillos y la presión de su mordedura realizan el desgarramiento de las carnes enemigas, una vez fijado la mordedura tienden a retirarse sin abrir la boca jalando parte de la carne mordida.
Diferente es cuando juegan, recordó que cuando jugaba con Sultán, que era un perro fiero, de poco juego, ganador de grandes peleas callejeras, el perro a pesar de su fiereza, lo mordía pero a la vez aflojaba la presión de su mordida, el perro sabe que es un juego, y cuando debe de morder seriamente, de eso si era muy consiente.
Un perro nunca muerde a su dueño, así sea castigado sin motivo, el perro sufre cuando su dueño sufre, o está en peligro; el perro no sabe hablar pero su mirada lo dice todo, te mira con miedo, con alegría, con indiferencia, pero al dueño siempre le muestra fidelidad, con el movimiento rítmico de su cola.
Por eso dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, si tu estás en la playa y te metes muy adentro, él te ladra en señal de alarma, para que no ingreses, es como si te dijese peligro, peligro no ingreses más. El perro te ataca si  se siente ofendido, te va decir con sus ladridos y mirada, un momento, quién eres, a donde vas, no te conozco, este es mi territorio.
En este caso ellos percibían los movimientos,  pero estos eran lentos débiles, no agresivos, y lo aceptaban, el líder lo estaba estudiando, le seguía cada movimiento, y se lo permitía.


ANTES DEL SÉPTIMO PASO.

Tal vez el líder era consiente que él no representaba ningún peligro, iban ya siete pasos, Eduardo veía que los perros no eran endemoniados como decían, quién o quienes serían los dueños de estos perros, porque eran tan descuidados dejando a estos animales sueltos, que falta de responsabilidad. Suspiró lentamente, cada uno de los siete pasos había sido una eternidad, pero había avanzado.
La última vez que en su vida sintió la eternidad del tiempo, fue cuando llamó por teléfono a Guni Ganosa, ella había partido a Lima, era entonces el amor de su vida, con ella había jugado desde pequeño, ella le decía tu eres mi novio, y chispita nuestra hijita, era una hermosa perrita, de color blanco, con un pelaje lanudo esponjoso, con unos ojitos y nariz redondos, sus orejitas siempre caídas para ambos lados de su rostro, que ternura de perrito, muy inteligente ese animalito, que juguetona incansable, chispita era la hija putativa en sus juegos, Guni lo abrazaba ella lo besaba, diciéndole EQ porque él se llamaba Eduardo Quesquén , chispita es nuestra hijita, tú eres el papá y yo la mamá, entonces lo besaba en la boca tomándole su rostro; Chispita era de raza Bichón Frisé,  fueron creciendo y decían que eran enamorados, hasta que un día cuando él tenía 14 años, ella partió de su lado; el padre de Mikita fue a trabajar a la ciudad de Lima, entonces se distanciaron, se escribían cartas, pero tenían la necesidad de escuchar sus voces y decirse te amo, ya que todos los días y a cada momento se decían cosas cariñosas, con gran ternura.
En oportunidades la señal no era muy clara,  y en oportunidades Guni le reclamaba, porque él se olvidaba de preguntar por chispita, diciéndole no me  preguntas como está nuestra hijita, entonces el  preguntaba, como respuesta ella le decía no te escucho amor mío y él volvía  a decirle casi gritando, como esta nuestra hijita, en una oportunidad la señora telefonista se quedó sorprendida al escucharlo hablar, y preguntar por su hijita, desde esa fecha  siempre le daba preferencia en la cabina.
En una oportunidad EQ entra la cabina, lastimosamente no hubo señal, siempre sucedía esto en la Compañía Peruana de Teléfonos, siempre tenía ese pequeño pero desesperante problema, entonces la señora telefonista movía la manija, colocaba y sacaba los cables con los chupones. La señora telefonista al verlo que era el jovencito que iba hablar con su esposa, le dijo:
-         Un momentito joven, no se preocupe, de todas maneras usted hablará con su esposa, él se puso más rojo que tomate en cosecha, espero y espero línea, esa espera después del bochorno, le pareció una eternidad, ya que tenía vergüenza de salir de la cabina, dentro de sí mismo decía.
-         Está señora piensa que soy casado y tengo una hijita. Entonces sonrío al recordar esos momentos, el perro líder parecía leerle la mente dejándole dar un paso más.






ANTES DEL OCTAVO PASO.

Los perros nuevamente gruñeron, entonces uno de ellos le olfateo el pie derecho, este volteo mirando a otro perro que no tenía cola, y este como si recibiese una señal se acercó para también olfatear, que raza era este último, no era de raza, era como dicen chusco, que suerte tiene los perros, eros no tienen diferencia de clases como tienen los seres humanos, a ellos no le interesa si uno viene de casa de pobre o de casa de ricos, si es aceptado en el grupo, lo integran como uno más de su familia, porque ellos no saben de color, de sangre, ni de dinero.
En su amado Chiclín había perros de raza en casa de muy pobres, de pobres y de ricos como en la casa de los  dueños  y estos jugaban con perros chuscos, o de raza que eran los señores Larco.
La familia Larco, en su casa criaba pavos reales, loros de diferentes razas, caballos de paso, ponis, grullos, monos de varias razas, sacha vacas, tigrillos, y otros animales más.
Chiclín era lindo, para entrar tenía dos portones, uno en la gran Vía y el otro en la avenida Larco, que eran las dos calles principales.
En la plazuela principal estaban la estatua del Trabajo, la estatua de Cristo Rey, la estatua de Javier Larco, ing. Agrónomo, que falleció toreando, dicen que este señor era el elegido para continuar la labor en Chiclín.
En esos momentos, él estaba en una penumbra, mientras a esa hora en Chiclín la energía eléctrica iluminaba perfectamente, la luz eléctrica era de 6 a 10 pm. En chiclín el vigilante nocturno se encargaba de revisar las casas, a partir de las 10 pm en donde había luz tocaban las puertas, pedían expliquen porque las luces prendidas si tenían problemas, les ayudaban, al que estaba en la calle también le preguntaban si tenían problemas, en este caso él, el vigilante nocturno se hubiese encargado de esparcir a los perros desde su caballo, con su fuete.
Pero su realidad era diferente, estaba solo, no tenía la ayuda que necesitaba, quizás en su caso el vigilante le hubiese preguntado el motivo de su visita, a qué hora iba a retirarse, si no aparecía de retorno a esa hora lo hubiesen buscado para que se retire, pero los perros no eran vigilantes, ni hablaban sólo gruñían olfateaban y esperaban un error para cobrar a mordiscones ese error, ya que este error sería tomado por ellos como una falta de respeto.
El olor de los diferentes perros que llevaba en su ropa, había despertado celos territoriales en esta familia perruna, pero tal vez el olor de Andrax y Chiquita podrían tranquilizarlos un poco, si eran unos perro románticos, como decía su padre, no había tiempo de verlos, entonces se decidió a dar un nuevo paso victorioso.


ANTES DEL NOVENO PASO.

Porque a mí, se dijo mentalmente Eduardo, su madre decía que a los que se portaban mal, les pasaba cosas malas, él no se había portado mal, era un buen hijo, un buen hermano, un buen amigo, un buen sobrino, buen novio, buen padre, porque hasta ese mismo momento había pensado en Guni y su hijita Chispita, recordó las veces en que caminaban de la manito con Guni, frente al cine Patria, él iba con su uniforme escolar, pantalón y camisa color blanco, y su chompa color rojo, ella con una faldita a cuadros, su blusita a cuadros y una chompita amarilla que le quedaba lindísimo,  entonces recordó también que las campanadas de la iglesia les daba las horas, daban campanadas fuertes para marcar o indicar la hora, campanadas débiles o medias campanas como decían ellos para las medias horas, si hubiesen esas campanadas él podría calcular el tiempo que estaba allí tratando de liberarse de los perros endemoniados.
Arrastro nuevamente el pie derecho lentamente, pero esta vez tembló un poco su estabilidad corporal, tenía que tranquilizarse, porque los perros, olfatean tu nerviosismo, apretó lentamente el casco romano, contra su cuerpo a la altura de la cintura tratando de buscar el cinturón para enganchar la punta de la oreja y aliviar el peso, no debería malograra el casco, pues al día  siguiente él tendría que usarlo en la obra de teatro por semana santa, él tendría que desarrollar el personaje  de Pablo de Tarso, apóstol de Cristo por decisión de Dios, Pablo de Tarso (1ra de Corintios:1) (Hechos9)
Pablo antes se llamaba Saulo, Saulo respirando aún amenazas de muerte contra los discípulos del Señor, se presentó al sumo sacerdote y le pido cartas para las sinagogas de Damasco, tenía la intención de encontrar y llevar presos a Jerusalén a todos los que pertenecieran al camino, fueran hombres o mujeres. En el viaje sucedió, que al acercarse a Damasco, una luz del cielo resplandeció de repente a su alrededor. El cayó al suelo y escucho una voz que decía:
-         Saulo ¿Por qué me persigues?
-         ¿Quién eres Señor? –preguntó
-         Yo, soy Jesús a quien tú persigues –Le contestó la voz- Levántate y entra en la ciudad que allí te dirán lo que tienes que hacer.

ANTES DEL DÉCIMO PASO.

A pesar de los perros endemoniados el no sentía ningún temor, los perros eran como sus amigos, en realidad mejor que los amigos, porque ellos aceptaban mucha veces lo que los amigos no aceptaban, y es que muchos dicen ser tú amigo pero no lo son, para Eduardo la amistad era la aceptación de un conjunto de sucesos, porque el ser humano era un ser gregario, entonces tienen necesidad de relacionarse, con otros seres a congregar.
Pero no todos aceptan un conjunto de sucesos positivos y negativos, todos  o casi todos se fijan más en lo que les favorece, no todos los que se reúnen lo hacen de una manera blanca o sana, muchos de ellos en la misma reunión se divierten tratando de dividir, de crear diferencias, escalas, sub grupos.
La verdadera amistad debe tener personas que sonríen con sinceridad o se preocupan de hacerte sonreír sanamente, en un momento difícil o en cualesquier momento de la vida,  los amigos se cuentan sus cosas intimas y también sus sueños y esperanzas, sus desalientos y sus tristezas, esto hace que las reacciones sean de alegría, de comprensión, de aliento, de apoyo, los amigos no divulgan un secreto.
Pero hay muchos que dicen que son tus amigos y te llevan a las drogas, robos, engaños, al cigarro, al licor, y cuando te ven en desgracia te abandonan, para que tú te abraces de tu triste soledad.
Los perros eran sus verdaderos amigos, aunque no hablan comprenden al ver el rostro de preocupación de sus amos, los perros juegan contigo te hacen reír, no te critican, no te engañan, pero este momento, era circunstancial, ellos no lo conocían, y en esto si se parecían a muchos de nosotros los humanos, no nos gusta la invasión territorial.


ANTES DEL DÉCIMO PRIMER PASO.

El perro también es un ser gregario, el perro puede compartir su territorio con la manada, pero en este caso como son perros caseros, no salvajes, ellos nos toman a nosotros los humanos como parte de la manada, o como parte de su familia. En este caso ellos estaban defendiendo a su familia, es decir a sus amos, del intruso, que en ese caso era él, entonces él tenía que demostrarle a los defensores del territorio, que él era parte de la manada de la casa de en frente, que la señora, hijas, hijos, él era el sobrino, el primo, el Nuevo amigo de ellos, que estaba seguro que en algún momento posterior lo iban aceptar, he incluso hasta iban a jugar un poco.
Pero en estos momentos era el intruso, el ladrón, el violador territorial, y eso naturalmente ellos, los perros estaban decididos a defender y hacerle saber, que si deseaba no respetar el territorio, ellos estarían dispuestos a darle una verdadera represalia.   
Cada vez que lo olfateaban confirmaban que el pertenecía a otra manada, además traía en sus prendas el olor de otros perros, ellos por el olor también podían saber que bravura tenían los perros de la manada de Eduardo, sabían de la exquisitez de las perritas,  y si los que le rodeaban eran machos, él tenía la esperanza de que sean platónicos, y crezca en ellos la esperanza de que los lleve a conocer o de que les traiga a esa cachorrita.
Entonces se animó a dar un pequeño vistazo a sus asaltantes, todos tenían el cuerpo rígido, extremidades extendidas, cola alta, el pelo de sus lomos estaban erizados, es decir demostraban disgusto, solamente los dos líderes mostraban sus colmillos, dos  movían la cola casi amigablemente, eran los que olfatearon el olor impregnado de Andrax y Chiquita.






ANTES DEL DÉCIMO SEGUNDO PASO.

Entonces sonrió, no porque piense en los perros enamorados, sino porque recordó que Sultán a pesar de su fiereza lloraba y rascaba la puerta desesperadamente cuando sonaban los cohetones y avellanas de las fiestas patronales.
En las fiestas patronales del Señor de la caña, todo era diversión, cerca del mercado y la plaza principal siempre había una botija con chicha de jora para que tomen los que deseasen,  los dueños de Chiclín hacían pintar todo el muro perimetral del pueblo de color rojo, quizás por ello le decían al Alfonso Ugarte,  equipo chiclinence de futbol, los Diablos Rojos de Chiclín.
Los Diablos Rojos era el equipo insignia, de Chiclín, no solamente era el orgullo de los chiclinences, también de Trujillo, este equipo se enfrentó no solamente con los mejores equipos del urbe nacional, también con equipos extranjeros, en el año 1936  se enfrentó con Gimnasia y Esgrima de ciudadela, de Argentina,  en 1937 con el Audax Italiano de Chile, a quién ganó, en ese año derroto también al San Cristóbal de Brasil, que venía de ganar nada menos que a Alianza Lima y Universitario.
Los diablos rojos eran lo máximo, tenían hinchas locales e hinchas nacionales, su padre conversaba que  el 23 de septiembre del 1942 derrotaron en Trujillo al Independiente de Avellaneda que era el campeón de Argentina.
Fuel el primer campeón de la Copa Perú, siempre vestían como buenos chiclinenses y buenos peruanos, con camiseta roja, pantalón blanco, medias rojas.
Recordó a su Arquero el popular Antonio Sanguinetto, Oscar Villalobos, Constante Mendoza, Erasmo Gamboa, Jorge Arce, José Quispe, conocido como chicamero  Quispe, José Farías Negrini, José Dioses, Tito Salavarria, Raúl Carrión, conocido como Cupón Carrión, Manuel Suarez, conocido como Meleque Suarez y Jorge Quipuzco.





ANTES DEL DÉCIMO TERCERO PASO.

El uniforme rojo del Alfonso Ugarte de Chiclín, eran tan rojos como los ojos del rostro adusto del perro líder, ¿Por qué eran agresivos los perros?, quizás llevaban en ellos una maldición de la violencia familiar, o tal vez el recuerdo en sus genes de las guerras vividas de sus antepasados.
Sí,  quizás sus genes eran así, por ello sultán, corría con el sonido de las avellanas y cohetones, también se desesperaba y rascaba la puerta, su padre decía que era porque los perros tenían 30 veces más sensibilidad en sus oídos que los hombres, su tío decía que no, que los oídos de los perros eran 100 veces más sensibles que los oídos de los hombres,  pero los hombres eran 100 veces más animales que los perros, porque sabiendo esto, se atrofian los oídos, siempre en las fiestas usan los fuegos artificiales. Pobres perros sufren mucho con estos sonidos.
Pero quizás sea hereditario,  porque en la antigüedad los perros en las época de guerra, comunicaban rápidamente  la presencia de los enemigos, tanto por el olor de la pólvora, como por el sonido de los cañones, y es que  tal vez los perros llevaban grabados este olor y este sonido mediante una cadena trans generacional, con la que se trasladaban o heredaban o se pasaban de generación en generación; esta herencia psicológica, tendrían los perros.
¿Herencias psicológica?, ¿Por qué no?,  si  tienen herencia genética, también pueden tener herencia psicológica,  quizás por ello su nerviosismo, y como los pobres no pueden hablar se desesperan, como que tratan de decirnos, peligro huelo a pólvora, hay sonidos de bombas, y rascan, rascan desesperados para ponernos en alerta, además los perros siempre han sido más fieles que nadie.



ANTES DEL DÉCIMO CUARTO PASO.

A Guni, no le gustaba que los perros sufriesen, o se desesperasen por los sonidos de los fuegos artificiales, él en esos tiempos no había meditado, ni leído, ni observado bien a los perros, pero si fuese el sonido de las avellanas lo que molestaba a los oídos de estos, ellos seguirían desesperados  así este presente su amo, pero basta con ver a su amo para tranquilizarse, ir junto a él como diciendo acá estoy a tu lado para entregar mi vida por ti.

Una vez más, la desesperación del perro no es por busca de protección, es por dar protección al ser que ama, que también es parte de su manada.
Los perros son tan fieles y aman verdaderamente, sin fijarse si tienes un cuerpo bonito o un rostro hermoso, ellos se fijan si los amas y te son fieles, pareciese que tuviesen más sentimientos que los hombres.
Si  los perros tenían más sentimientos que los hombres, y eran más fieles que los hombres, entonces porque las mamás o las tías cucufatas decían, este está peor que perro atrás de la fulana o atrás de esa tal por cual.
Tal vez, a si le dijeron a Guni, que tanto llamas a ese tal por cual, si nosotros somos una familia de alta alcurnia;  ellos piensan que son de alta alcurnia, el único que fue y es  de alta alcurnia en este mundo, es Jesús de Nazaret, y su familia, además, Jesús de Nazaret dijo: El que quiere ser el primero sea el último y servidor de todos (Marcos9: 30-37)
Entonces, ¿Por qué ellos se creen que son los primeros?  No son los primeros, y no porque yo lo diga, porque eso es lo que dice la biblia, el dinero no te hace el primero, te hace creer que eres súper poderoso, súper abusivo, súper arrogante, súper importante, súper bello, súper sabio, en realidad te hace sentir megalomaníaco.
Ese estado psicopatológico les da un estado de delirios de grandeza, poder, riqueza u omnipotencia, y piensan que ellos deben tener el control hasta de los sentimientos de las personas, Guni en una de sus últimas conversaciones, le dijo:
-         E.Q. Tú eres mi novio eterno, mi amigo, mi esposo, nadie nunca te sacará de mi corazón, estarás conmigo hasta el día de mi muerte, siempre te amaré, pero hoy mi madre nos separa, dice que tenemos un apellido importante,  a mí no me importan los apellidos, lo que más me importa es tu amor, voy a estudiar para ser algo y mantenerme, tú también estudia, para ser algo y así cuando tengamos nuestra profesión nadie podrá separarnos.


ANTES DEL DÉCIMO QUINTO PASO.

Él nunca se olvidaría de Guni, quizás el destino no los uniría posteriormente, quizás la  madre Guni envié a estudiar a su amada a otro país, a un lugar donde el jamás podría llegar o saber.
Tendría que ver el destino también en la unión o desunión con su Guni, acaso uno nacía con un destino que tenía que cumplirse al pie de la letra, acaso el científico nacería para ser científico y el ladrón para ser ladrón, el pobre para ser pobre y el rico para ser rico, el drogadicto y borracho para ser drogadicto y borracho  y el santo para ser santo.
Que gracia tendría la vida, si supiéramos nuestro destino o el destino de nuestros hijos, quizás haríamos como dicen que hacían los espartanos con sus hijos si nacían  defectos los tiraban del monte Tai geto.
El destino, todos los fracasados echaban la culpa de su fracaso al destino,  su tía decía que el destino no se puede evitar, y si tú naciste para alguien, para ese alguien tenías que ser, de lo contrario esa persona no era para ti. Así de fácil, entonces el destino es como un poder sobrenatural que era inevitable de dicha o fatalidad.
Quizás mi destino no sea con Guni, pero lo que más deseo es que Guni sea feliz, completamente, que siempre me tenga presente como un hermoso recuerdo, yo si la amaré hasta mis últimos días.
Tal vez, encuentre en este hermoso mundo a una mujer que me haga olvidarla, tal vez estoy ya pensando como un fracasado, sin siquiera haber intentado luchar por ella, como hacerlo, ella estaba lejos, sus padres lo cercarían y evitarían se encuentren, no es el destino, tengo que llegar a Lima, encontrarla, luchar por su amor, estudiare como ella dice.
Quizás supiéramos nuestro destino, nuestra vida no sería tan agradable, saber que uno va a tener una vida de sufrimientos, saber el día que  vas a morir, como te accidentarás, que enfermedades tendrás, como se portará tu amada, tu amigo, tu padre, si va ser engañado,  si Guni se casaría con otro o con él, no, eso no, mejor que pasen las cosas sin que uno sepa, cómo vivirían las personas pensando  en tantas cosas, perderían el contacto  con la realidad, dentro esta psicosis andarían en alucinaciones o delirios, sin personalidad y confundidos en sus pensamientos ya que pensar en una y otra cosa del destino, no podrían organizarse mentalmente.
Quién como los perros, ellos no piensan ni en su futuro, ni en sus estudios, ni en su trabajo, tal vez también sufren cuando son separados, pero no creo que se enamoren y sean eternos enamorados de una perrita.
Lo que pasa que las persona que caen en desgracia, siempre buscan un culpable, muchas veces como un escudo para alejarse de sus propios errores, y hasta en sus alucinaciones trata de vengarse, cuando alguien les dice que tiene daño, o que un amigo o la pareja le engaño, que desgracia, que fatalidad, grita llora, se jala los pelos, amenaza, jura venganza; algunos maldicen su destino o el día de su nacimiento, que tontería más grande.
Entonces su destino, sería estar en esos momentos rodeados de perros, para probar su temple, su cobardía, su dominio, su comprensión o su conocimiento de los perros como siempre se jactaba.


ANTES DEL DÉCIMO SEXTO PASO.

 Por primera vez les dio una mirada girando lentamente su cabeza, habían más perros de lo que él pensaba, uno de los perros que lo rodeaba más cercanamente realizó un movimiento como que se retiraba, entonces otro perro, un boxer quiso ocupar su lugar de manera prepotente, el perro que parecía retirarse intentó ocupar nuevamente su lugar, al obtener una negativa del invasor su reacción en ese instante fue tremendamente agresiva, sin importarle el tamaño del invasor, produciéndose un gresca perruña, en esta pelea se rompe el cerco, entrando otros perros más en combate, E.Q. sintió que su corazón se le acelero, trató de controlarse pero temblaba interiormente, un sudor frío corrió su frente, tenía deseos de gritar, las piernas estaban a punto de traicionarlo, uno de los perros caídos lo tocó, ligeramente, si lo hubiese tocado con más peso, le habría hecho  perder la estabilidad, eso sería mortal, recordó, que su madre contó que hace poco tiempo un grupo de perros habían destrozado a un hombre dándole un horrible muerte y que hasta parte de su carne se habían comido, dos gruesas lágrimas se formaron en sus ojos, este será mi fin, se dijo a sí mismo.
Eduardo Quesquén  levantó su mirada, diciendo:
-         No, este no es mi destino, esto es circunstancial, el destino no determina ni éxito, ni fracaso, nuestro futuro depende de nosotros mismos, de la protección de nuestro señor Jesucristo y su padre amado, nuestro Dios, que es nuestro creador, porque Él dijo: Que los cielos y la tierra escuchen lo que acabo de decir; te puse delante de la vida o la muerte, la bendición o la maldición. Escoge, pues, la vida para que  vivas tú y tu descendencia, Ama a Yahvé y escucha su voz, uniéndote a Él para que vivas y se prolonguen tus días, mientras que habites en la tierra. (Deuteronomio29: 19,20)
-          

ANTES DEL DÉCIMO SÉPTIMO PASO.

El perro que estuvo delante corrió a participar en la pelea, otro perro uno casi obeso ocupo su lugar.
 E.Q. sentía todo el temor del mundo en su interior, los gritos de los perros, los gruñidos, los alientos, las revolcadas, eso iba a ser un peleón infernal como guiados por los demonios, sería una pelea de perros endemoniados. Todos esos perros desconocidos para él y él a su vez también era un desconocido para los perros; donde estaban sus dueños eso era una irresponsabilidad, entonces intento gritar, pero rápidamente se contuvo, sabía que esto también sería un gran error, se dominó, quiso llorar por primera vez, pero no podía irradiar temor en presencia de ellos, además los perros pueden percibir las feromonas que se liberan cuando se tiene miedo y eso les da más decisión para realizar sus ataques, aunque ellos reconocen cuando son mayoría, cuando deben atacar, cuando solo dan una advertencia.
Le habían tenido lastima, no le atacaban por lastima, o quizás porque no era su hora de morir, esa era la verdad, porque si lo atacaban todos esos perros juntos, no tendría posibilidad de salvarse, pero aceptar que no era su hora era aceptar el destino, y eso no era lo que él quería aceptar,  en esos momentos lo más importante, era no realizar movimientos dubitativos, de lo contrario el perro puede tomarlo como una amenaza, y comportarse agresivamente,   eso sí era real.
Entonces algo de su cuerpo lo traicionó, su corazón de agito tremendamente, parecía que salía de lugar, ese algo fue su sudor, transpiró en los momentos en que más miedo tenía, y eso era exportar los temores internos al exterior, esto sucedió en los momentos en que comenzaron a pelear los perros, ese traslado de hormonas de su interior a su exterior, tenía un culpable, el culpable de ese error, era el tiempo, había transcurrido tan lentamente, que estimuló al cerebro, en un abrir y cerrar de ojos, deseaba huir de ese lugar, cómo desaparecer, cómo no estar en ese territorio de propiedad de esos perros, esos sabuesos  que ya comenzaban a perder su control, era un imposible, entonces se encomendó a Dios. 


ANTES DEL DÉCIMO OCTAVO PASO.

En otras oportunidades a los dueños de los perros que agredían hasta dar muerte a una persona, los encarcelaban, y a los perros los mataban, mucha gente decía que esto era correcto, pero ni con todos los castigos dados o que diesen, esto devolverían la vida a la persona muerta o liberarían del doloroso paso de muerte al asesinado.
-         La victima que culpa tenia de que los dueños no encadenasen o guardasen a sus perros dentro de sus viviendas.
-         ¿Por qué motivo razón o circunstancia estos perros estaban fuera de los hogares de los dueños?
-         ¿Todos esos perros,  serían de un solo dueño? ¿Tantos perros, para un solo dueño?, no era posible, estos perros pertenecían a varios dueños, Entonces no era un solo irresponsable, eran varios irresponsables.
En esos momento sintió que uno de ellos le tiró del pantalón, él consideró que se le terminaba su vida, entonces otro perro más intervino en la pelea, prácticamente eran dos contra dos, los dos primeros que se peleaban entre ellos, terminaron enfrentándose ante el líder y el otro perro que intervino que se solidarizó con el líder.
Un perro lanudo color blanco con negro, era el quinto perro que intervenía, los otros perros un doberman, un pastor, un galgo, un cruzado doberman con pastor, y el ovejero, un labrador, un mastín y un dogo entraron en una pelea que no se sabía quién atacaba a quién, él estaba paralizado, los gruñidos de los perros era enorme sin embargo, el perro que lo estaba cuidando ni se inmutaba solo lo miraba seriamente, como tratando de tener una excusa o pretexto para atacarlo sus manos transpiraban, su pantalón estaba húmedo, al igual que su camisa, uno se caía, el otro perro atacaba, mientras que otro defendía al caído, y así en una revuelta tremenda, él mirando y escuchando sentía que el casco se le iba cayendo, del lugar en donde lo había asegurado, una vez más imploró.
¡DIOS MIO AYUDAME!


ANTES DEL DÉCIMO NOVENO PASO.

Al fin cayeron dos, después de tanta resistencia, luego dos más, el perro que lo observaba se dio cuenta, de lo que estaba sucediendo, entonces parecía que se le abalanzaba, el volvió a implorar no me abandones Señor, ante s de comenzar a orar.



ORACIÓN, PARA LA SALVACIÓN.
Señor mío, en nombre de tu amado hijo Jesús
Te pido, me alejes de este peligro
Sálvame, adorado Dios
Perdóname mis errores
Mis pensamientos injustos
Mis faltas a mis semejantes
Oh señor mío, Tú que eres justo
Mi Dios único y verdadero Dios
Te pido, no me dejes solo
En manos del maligno
Socorre Señor, a éste tu hijo
Porque Tú Señor, eres mi Creador
Mi adorado Señor, ten piedad de mí
Porque sin Ti, no soy nada, Señor bendito
Que todos reconozcan tu justicia Señor
Hazme sobrevivir de esta
Y otras calamidades en mi vida
Endereza mi corazón perverso
Siento vergüenza Señor
De todo  malo cometido en mi vida
Tú, hermoso Señor amado y fuerte
Tú, invencible soberano de los cielos y de la tierra
Tú, Señor del bien y del amor eterno
Tú, Señor creador de todo cuanto existe
Eres mi único Dios, y eterno Dios
A ti te pido mi adorado Señor
Escuches mis oraciones y mis suplicas
Concédeme la liberación de este y otros peligros
Y que el mundo sepa que eres Tú, nuestro Dios
Quien me libertó, de todo los peligros
Bendíceme y cuídame Señor
Que estoy desfalleciendo
Llena mi alma afligida y sin fuerzas
De valor y fortaleza
Por tu gloria y justicia, Señor bello
Ahora y siempre,  Amén.
Willder Gamarra Soles
02.02.2014
Trujillo- Perú.




ANTES DEL VEINTEAVO PASO.

El perro guardián, que lo amenazaba, retrocedió dos pasos, luego su rostro como que había visto algo que le asustaba, retrocedió rápidamente, ya no gruñía, los perros que estaban peleando se separaron corriendo despavoridos, del lugar, entonces fue que los dos últimos en caer, se juntaron a las dos primeras lagrimas que estaban ya en su mejillas y unidas cayeron al piso.
Una voz le dijo:
-         Ve y no peques más.
Esa era la misma voz, que en muchas oportunidades escucharía en su vida, E.Q. Como todos los seres humanos, caminaba, jugaba, bromeaba, pero una voz le apartaría de una conversación o reunión, no escuches, no participes, levántate este no es tu lugar, y él le obedecería inmediatamente.

Todos los personajes principales  de esta historia son ficticios, cualesquier similitud parcial o total, es solo una coincidencia.



ORACIÓN, PARA LA SALVACIÓN.

ORACIÓN, PARA LA SALVACIÓN.
Señor mío, en nombre de tu amado hijo Jesús
Te pido, me alejes de este peligro
Sálvame, adorado Dios
Perdóname mis errores
Mis pensamientos injustos
Mis faltas a mis semejantes
Oh señor mío, Tú que eres justo
Mi Dios único y verdadero Dios
Te pido, no me dejes solo
En manos del maligno
Socorre Señor, a éste tu hijo
Porque Tú Señor, eres mi Creador
Mi adorado Señor, ten piedad de mí
Porque sin Ti, no soy nada, Señor bendito
Que todos reconozcan tu justicia Señor
Hazme sobrevivir de esta
Y otras calamidades en mi vida
Endereza mi corazón perverso
Siento vergüenza Señor
De todo  malo cometido en mi vida
Tú, hermoso Señor amado y fuerte
Tú, invencible soberano de los cielos y de la tierra
Tú, Señor del bien y del amor eterno
Tú, Señor creador de todo cuanto existe
Eres mi único Dios, y eterno Dios
A ti te pido mi adorado Señor
Escuches mis oraciones y mis suplicas
Concédeme la liberación de este y otros peligros
Y que el mundo sepa que eres Tú, nuestro Dios
Quien me libertó, de todo los peligros
Bendíceme y cuídame Señor
Que estoy desfalleciendo
Llena mi alma afligida y sin fuerzas
De valor y fortaleza
Por tu gloria y justicia, Señor bello
Ahora y siempre,  Amén.
Willder Gamarra Soles
02.02.2014

Trujillo- Perú.