TÚ SEÑOR QUE HAS MUERTO EN LA CRUZ
Tú
Señor Jesús, eres el ejemplo de obediencia
Porque
Tú, no has muerto como mártir
Tú,
has muerto como un salvador de pecados
Te
entregaste a los malvados, para redimirnos
Tú
nos demostraste tanto amor
Hasta
en tus últimos momentos en la tierra
Obedientemente
a la voluntad de tu Padre
Nuestro
Dios Creador de todo cuanto existe
Y
yo, Señor porque no puedo vivir en obediencia
Señor
mío, porque mi corazón no aprende amar
No
aprende a obtener ese amor puro y santo
Será
porque mi lengua es tan precipitada
Y
Tú sabes Señor Jesús.
Que
ningún hombre es capaz de controlar su lengua solo
Será
porque mis ojos no llenan de luz a mi cuerpo
Y
Tú sabes Señor Jesús.
Que
la oscuridad me lleva a la penumbra de los errores
Será
porque mis manos tocan lo que no deben tocar,
O
se llevan lo que no deben llevar
Y
Tú sabes Señor Jesús.
Que
es preferible perder una mano que el cuerpo entero
Será
porque mis pensamientos impuros
Hacen
adulterar a mi corazón
Y
Tú Señor Jesús
Nos
quieres con corazones limpios
Tú
sabes Señor Jesús
Que
solos no podemos conseguir paz
Tranquilidad,
pensamientos sanos
Por
eso te pido Señor amado
Tú
que eres nuestro adorado guía
Preciosísimo
Señor Venerable
Llenes
mi corazón y mi cuerpo
Con
tu espíritu santo
Que
cambies mi vida
Me
alejes de la envidia
De
los malos pensamientos
De
las tentaciones
Del
maligno
Y
me tengas contigo
Mi
sagrado Señor bendito
Y
sólo así, mi corazón aprenderá amar
Con
ese amor puro y santo
Amén.
Autor:
Willder Gamarra Soles
20.01.2015
Trujillo-
Perú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario