jueves, 6 de enero de 2011

MEMORANDUM- PARTE 4-C: Y TÚ…NADA






MEMORANDUM- PARTE 4-C: Y  TÚ…NADA



Nicolás esa noche se quedó pensando en las palabras del anciano, de su bendición y del cariño con que le hablo, en su cama trataba de orar y no sabía  el Padre Nuestro, se pasó toda la noche preguntándose ¿Por qué reaccione de esa manera? ¿Por qué era tan abusivo, el cobarde? ¿Por qué me ha bendecido el viejito? ¿Me iré a morir? ¿O el viejito se ira a morir? Recordó que cuando era más pequeño entraba a la iglesia de Santo domingo rezaba a su manera, pero eso era hace mucho tiempo y no recordaba como lo hacía porque nunca decía un Padre Nuestro ¿Por qué nunca me enseñaron el Padre Nuestro? Pobrecita mi madrecita se la pasa trabajando desde que amanece hasta que anochece, para darnos de comer, no tiene tiempo, Señor perdónala, quizás el viejito tenga razón y en el fondo no soy tan malo como trato de ser ¿Me recibirás tú señor? Estás molesto conmigo y tienes razón, yo no se rezar, ni siquiera he leído la Biblia una sola vez en mi vida, escúchame señor, como voy a vivir si tan sólo pudiera mirarte, o escucharte para que me digas cuando debo corregirme, y mañana hemos quedado en robarle le libro al chino de la librería, yo también soy un ladrón como el cobarde, también soy un cobarde, que me hace el pobre chinito, nada, nada me hace se lo vamos a robar solamente para ir a tomar chicha piurana y comer cecinita, pero si no lo hacemos que van a decir mis amigos, Señor ya no estés molestó conmigo, Tú sabes que yo quise ser cura cuando era pequeño, quería estar en un convento dedicado a ti, no te mentí, pero ahora soy diferente, me peleo casi a diario y me refugio en las cantinas, pero en el fondo no soy malo, no me gusta que abusen de nadie, ni me gusta abusar de nadie, si tan solo supiese que me estás escuchando, que me puedes perdonar ¿Qué me vas a perdonar? Pero al menos Señor perdona los pecados de mi madre linda, aunque no creó que ella tenga pecados, ella es tan buena, tan santa, perdónala Señor y cuídala, perdona a mis hermanos, ellos si tiene pecados, pero son mejores que yo, como dicen en una casa siempre hay una oveja negra y esa oveja negra soy yo ¿Señor, y si me haces el salvador de los oprimidos? pero tengo que seguir peleando y a ti no te gustan los que pelean, no te entiendo ¿Cómo vamos a defender a los que no pueden defenderse si no peleamos? Es difícil solamente Tú puedes hacer eso, pero lo que te digo es que me cuides porque no siempre se gana, perdóname por lo que te estoy pidiendo, no te enojes, pero no se como orar más pequeño lo hacía a mi manera pero nunca aprendí el Padre Nuestro que es lo que enseño Tú hijo Jesús, y si nosotros somos tus hijos entonces es nuestro hermano mayor y un hermano mayor si nos comprende a veces, perdóname Jesús, imagínate ya quiero ser como tu hermano, perdóname por favor, pero voy a intentar orar  y levantó sus ojos y dijo:
Continuará...

No hay comentarios: